martes, 6 de mayo de 2008

Las imágenes del horror.

El Instituto Hoover exhibió el martes una colección de diez fotografías inéditas que muestran la devastación que generó la explosión de la bomba atómica de Hiroshima, el 6 de agosto de 1945. Estas imágenes, de las que se desconoce su autor, fueron encontradas, en el año de 1945, en una cueva a las afueras de la devastada ciudad, por un soldado norteamericano de nombre Robert L. Capp, el cual las donó al Instituto Hoover en 1998 con la condición de que no fueran publicadas hasta el año 2008.

De la colección de diez fotos, tres ya habían sido exhibidas en el libro Atomic Tragedy, pero la serie completa fue exhibida hasta ahora. En esta colección de fotos se muestran miles de cadáveres, pero lo peor es que demuestran la triste capacidad que tiene el hombre de deshacer el mundo y a otros seres humanos.

A continuación exhibiremos estas fotos con el fin de mostrar una realidad, la tristeza de la devastación del hombre contra el hombre mismo. Estas imágenes deben de ser vistas con criterio amplio y sin morbo, además deben ser vistas solamente por personas mayores de 18 años.

Colección fotográfica de Hiroshina de Robert L. Capp. Foto 1.

Colección fotográfica de Hiroshina de Robert L. Capp. Foto 2.

Colección fotográfica de Hiroshina de Robert L. Capp. Foto 3.

Colección fotográfica de Hiroshina de Robert L. Capp. Foto 4.

Colección fotográfica de Hiroshina de Robert L. Capp. Foto 5.

Colección fotográfica de Hiroshina de Robert L. Capp. Foto 6.

Colección fotográfica de Hiroshina de Robert L. Capp. Foto 7.

Colección fotográfica de Hiroshina de Robert L. Capp. Foto 8.

Colección fotográfica de Hiroshina de Robert L. Capp. Foto 9.

Colección fotográfica de Hiroshina de Robert L. Capp. Foto 10.

1 comentario:

Lizzette González dijo...

A catorce días para un año más después de Hiroshima y el mundo sigue igual... Tal vez no apilamos cadáveres en holocaustos ni después de bombas nucleares, pero otros horrores son latentes, aún nos secuuestran los fantasmas del pasasdo y el futuro por el que tanto se alude a un "cambio" no se ve muy prometedor...