Después de una fuerte escalada de violencia que ha azotado Sinaloa en los últimos días, en la cual han muerto ocho policías y se encuentran desaparecidos cuatro, la aparición de narcolonas ha escandalizado al país. El día de ayer aparecieron mantas con mensajes de desafío al Ejército y a la Policía Federal. Estas mantas fueron presuntamente puestas por Arturo Beltrán, hermano de Alfredo Beltrán alias "El Mochomo", narcotraficante capturado en Culiacán en enero de este año. Esto nos remite a las mantas instaladas por Osiel Cárdenas, líder del Cartel del Golfo, con motivo a los festejos del Día del Niño en Acuña, Coahuila, o a las montadas en Nuevo Laredo, Tamaulipas, hace unas semanas, donde se invitaba a militares y a policías a desertar del Ejército y/o de sus corporaciones para unirse a los Zetas. Es lamentable que el narcotráfico tenga tal fuerza que, amparado en la impunidad, descaradamente use medios tan visibles para festejar a los niños en sus día, para amenazar a la autoridad o, aun peor, para reclutar gente a sus filas.No cabe duda de que los señores feudales de gran parte de nuestro territorio son los narcotraficantes, por lo cual es claro que este problema no es de seguridad pública, sino de seguridad nacional.
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